Dificultades comunes, una noción imprescindible...
Emplear el término de “dificultades comunes” nos hace situarnos en un enfoque diferente al que estamos acostumbrados, ayudándonos a salir de la dicotomia de normal-anormal contemplada desde el punto de vista “patológico” e infundada por el DSM IV (Manual Diagnóstico Estadístico) y la CIE 10 (Clasificación Internacional de las Enfermedades). Utilizar la palabra “trastorno” “parafilia” “perversión”... supone ver la sexualidad desde ángulos escabrosos y poco comunes.
Como consecuencia de prejuicios y tabus, se ven estas “diferencias” (que en realidad son frecuentes) como viciosas, perversas y enfermas. No “matizar” en los conceptos implica favorecer el “encasillamiento”, recurriendo al juicio y diagnóstico desde perspectivas de tiranía.
Ver las cosas desde el Hecho Sexual Humano (HSH), supone eliminar estos conceptos utilizados asiduamente por la psiquiatria en pro de una visión más integral, matizada y positiva.
Como consecuencia de prejuicios y tabus, se ven estas “diferencias” (que en realidad son frecuentes) como viciosas, perversas y enfermas. No “matizar” en los conceptos implica favorecer el “encasillamiento”, recurriendo al juicio y diagnóstico desde perspectivas de tiranía.
Ver las cosas desde el Hecho Sexual Humano (HSH), supone eliminar estos conceptos utilizados asiduamente por la psiquiatria en pro de una visión más integral, matizada y positiva.